UNA NOVELA QUE NO TIENE FIN.

Medellín, 26 de febrero de 2016
"Si quieres la paz, prepárate para la guerra".Una máxima o dicho que se viene escuchando desde que el hombre comenzó a pensar y hablar; miles de guerras a lo largo de la historia de la humanidad no han servido para nada, porque no aprendemos.Algunos años de relativa calma y prosperidad; luego de las depresiónes de la Primera y Segunda guerra mundial.Parece que los pueblos y los países se levantan como el "Ave Fenix", de las ruinas y se empieza nuevamente a renacer.A reconstruir lo destruido y se piensa en el bienestar de las poblaciones, cerrar y cicatrizar heridas, todos jalonando para el mismo lado, y como por arte de magia van apareciendo los líderes que toman las riendas de los pueblos, aparecen los adalides de la humanidad, pero se van gastando y degenerando en comportamientos egoistas, ventajismos, y los odios ( que siempre están ahí en la trastienda del cerebro pero de acuerdo a la evolución de cada ser, seguirán dormidos o despertarán con toda la fuerza y el terror), se van represando, y el deseo de venganza crece.
Colombia, desde su historia más reciente, 215 años de supuesta libertad, no ha sido la excepción.La inequidad, las injusticias, el desgreño administrativo y solo los grupos económicos fortalecen sus finanzas e infraestructura, y solamente sus propietarios y socios se benefician, son los mismos apellidos que a lo largo de estos años se han robado al país, por ejemplo, los grandes consorcios que participan en la construcción y vías de cuarta generación (4G), entre muchos otros: El Grupo Empresarial Antioqueño, con Argos a la cabeza, grupo Santodomingo, Ardila Lulle, Luis Carlos Sarmiento Ángulo, exgobernadores, exalcaldes, expresidentes, exministros y personalidades influyentes: Juan Gómez Martínez,  Álvaro Villegas Moreno, Luis Alfredo Ramos B, Ernesto Samper, Andrés Pastrana A, Álvaro Uribe V, Enrique Peñalosa, Sergio Naranjo, Sergio Fajardo V, Anibal Gaviria C, Fabio Correa, Fernando Londoño, Mauricio Cárdenas Santamaría y familia, Germán Vargas, César Gaviria, Francisco Santos,  Mario Huertas C, Jorge Londoño, J.Mario Aristizabal, Florentino Pérez, Juan Manuel Santos, Germán Vargas, mejor dicho, la lista de nunca acabar, y los "yuppies " del sector privado de los grupos económicos y los integrantes de los llamados partidos políticos, y es similar en cada departamento.
Mientras tanto el pueblo, los trabajadores a duras penas sobreviven, los más afortunados consiguen alguna formación y mejoran la calidad de vida de sus hogares; pero el campesino, fue y sigue siendo desterrado de su entorno, arrinconado en los cinturones de miseria de las grandes capitales y en las pequeñas ciudades y pueblos.El campo colombiano ha sido el escenario de la guerra, allí donde las comunidades de negros, indígenas, colonos y nativos del lugar, son desalojados a la fuerza para construir megaproyectos sin el apoyo y concurso de los gobiernos de turno, tratando  de hacer empresa, destruyen hectáreas de bosque nativo, contaminando y destruyendo los nacimientos de agua, y el recurso hídrico se agota, al margen de la ley o en negocios ilícitos( pero que tienen  la bendición de los gobiernos  que otorgan licencias a diestra y siniestra, y sin estudios ambientales, serios y responsables), y la minería  ilegal crece contaminando y envenenando especies y perjudicando en la salud a las poblaciones donde se encuentran; el contrabando de fauna, flora y especies nativas y de toda clase de minerales que abundan en nuestro territorio.Grandes extensiones  de selva son taladas y destinadas para la industria de la ganadería con fines lucrativos; la siembra de coca, mariguana para satisfacer la demanda interna (en crecimiento) y externa de los países industrializados, es la  excusa que genera violencia y muerte.¿Dónde están los carteles norteamericanos, y de la Unión Europea y el resto del mundo?Los productos de pan coger no llenan las expectativas de los agricultores, y presionados, obligados, pero al fin de cuentas para sobrevivir se ven obligados a seguir ese camino.
En Colombia hay muchos intereses en juego con los diálogos de paz en la Habana, Cuba, y el pueblo colombiano necesita saber que es lo que se va a votar en el reférendum.Se necesita claridad y no basta  un "si o un no".El apoyo  del gobierno americano, no es gratuito, la gran potencia del norte, necesita tener su "solar libre de alimañas", y venir con toda libertad por nuestra riqueza y la de los países vecinos; sabemos que este gobierno como los anteriores sólo tienen y han tenido la voluntad de "regalar y rifar nuestros recursos naturales", y estos padres de la patria  terminarán viviendo el "sueño americano en el norte y felices porque tienen visado americano", sacan pecho, y les gusta salir en los medios, sin ningún rubor, consideración y verguenza.
Colombianos a exigir la verdad, y que este proceso de paz no sea la excusa para  nacionalizar o legalizar las fortunas personales de los corruptos  de cuello blanco, de otras tendencias, y de los grupos que representan.
Colombia, como, nos dueles.

Juan Del Sur